Por qué los triunfadores necesitan un coach

Parece una contradicción pero voy a argumentar mi punto de vista. Parto de una conferencia que dio Pilar Jericó en el ExpoManagement de 2012 en la que mostraba un estudio de Zanger Folkman basado en 24.657 líderes sobre su satisfacción tras trabajar sus puntos de mejora o sus fortalezas.

Aquellos que trabajaron sobre tres de sus fortalezas manifestaron una satisfacción por los resultados de un 73% mientras que los que trabajaron sobre tres de sus puntos de mejora ese dato bajaba al 25%. Casi tres veces más.

Como Pilar ha tenido la gentileza de compartir la conferencia en abierto, os la incluyo aquí porque la considero de mucho interés. En su día este dato me llamó la atención pero no supe ponerlo en contexto, entre otras cosas porque yo estaba en un estado de transición personal, todavía con más dudas que certezas.

Yo estaba en las fases iniciales de mi formación y certificación de coach ejecutivo CORAOPS y debo de confesar que era bastante escéptico, lo estaba haciendo por si aprendía algo y pensaba que el coaching lo necesitaban otros.

Pero el curso que impartía el equipo de ICE Coaching dentro del Curso Superior de Coaching Ejecutivo de la Universidad Autónoma de Madrid era muy práctico y hacías y recibías mucho coaching. Y, casi sin querer, empecé a darme cuenta de lo que realmente me gustaba, de los valores que veía detrás de mis metas y a ponerme un objetivo que me ha traído hasta melioora.

No soy capaz de asegurar lo que hubiese pasado sin este apoyo que recibí casi sin quererlo y partiendo de la soberbia postura de que yo sabía lo que quería y no me hacía falta ayuda. Y no sólo estoy hablando de la definición y clarificación de los objetivos, sino del proceso de lucha contra la incertidumbre y los miedos que me acosaban en la situación en que estaba.

Gracias al coaching logré ir venciendo mis limitaciones mentales y dando un vuelco hacia un pensamiento positivo. Cuando aparecía un problema la postura ya no era “esto es muy difícil y no se puede hacer”, sino “cómo vamos a hacer para superar esta dificultad”, como ocurría en los momentos de éxito y como estaba empezando a olvidar ante el acoso del entorno.

El triunfador lo es porque tiene el talento y, sobre todo, la actitud de triunfar. Los acosos del entorno son iguales para todos y el coaching facilita a los triunfadores el camino hacia el éxito. Ellos lo pueden lograr por sí solos. Con un coach lo hacen antes y mejor.