Esta entrada no tratará de los Estereotipos en la Internacionalización de los Sistemas de Información o, de cómo Identificar y materializar oportunidades de mejora o de la Motivación en el trabajo. Hay momentos en que las circunstancias nos hacen detenernos para valorar lo que tenemos, y cómo no, reflexionar sobre lo que nos rodea y ver cómo podemos contribuir a mejorarlo.
Mi hija de 13 años regresaba caminando sobre las 20:30 de hacer un trabajo en casa de una amiga. Ya muy cerca, en el portal vecino, escuchó un gemido angustioso de alguien tirado en el suelo, pero que no lograba ver con claridad (afortunadamente) porque la valla se lo impedía. Se trataba de una chica de 20 años que segundos antes había saltado desde un sexto piso. Nuestro pensamiento sigue con la chica y con su familia en estos momentos terroríficos y la pregunta que siempre nos hacemos (¿por qué?) se quedará en el aire.
Hace dos meses aproximadamente una empresa extranjera me pidió el favor de entrevistar a un potencial candidato (por teléfono) tan sólo para evaluar su nivel de español. Preparé un guión de preguntas dividido en tres aspectos (hobbies, trabajo que más le ha gustado y última noticia de cualquier medio que le hubiera impactado). Pensé que eran tres aspectos cotidianos que me permitían “medir” el nivel de su idioma.
Cuando llegamos a la última parte (noticia en medios) empezó por narrarme una noticia sucedida en su tierra; no conseguí en un primer momento entender de qué se trataba. Le pedí que me la repitiera. No la estaba entendiendo básicamente porque las dos palabras más importantes de la noticia, las desconocía en español: emprendedores y suicidarse. Hablaba de que había “muy problemas” en lugar de muchos problemas en su tierra (por la actual situación económica) y que por tanto varios emprendedores (¡26 para ser exactos!) “se han matado”, quiso decir, se han suicidado.
¿Cómo se prepara uno para los malos momentos que se tienen? ¿A quién puedes
recurrir cuándo los tienes?. Realmente, no hay una única respuesta. Si estás dentro de una organización, por ejemplo, sí se puede crear y propiciar un entorno de trabajo más amigable. Alejado de esa competitividad exagerada que muchas veces las propias organizaciones propician entre sus empleados, haciéndonos creer que esto va en beneficio de la propia organización y de sus objetivos. Personalmente creo que, fomentando equipos de trabajo que realmente actúen como tal, con sus integrantes motivados y con objetivos comunes, se beneficia mucho más a los empleados y a la propia organización. Es anteponer la motivación a la frustración del empleado, el ánimo por el trabajo al decaimiento y el aislamiento, el reconocimiento y apoyo del grupo en el que trabaja.
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 María Luisa Santa María tiene más de 15 años de experiencia en la gestión de grupos de trabajo para la implantación de proyectos informáticos de alto impacto en términos de mejora de la calidad y reducción de costes.http://es.linkedin.com/pub/maisasantamaria |